El Grupo de Inmatriculaciones Asturies denuncia que Foncalada es lo único del Prerrománico que nos quedar a los asturianos en propiedad, el resto está en manos de la Iglesia Católica
Desde 1946 y hasta hace cinco años la iglesia católica ha tenido la prerrogativaha de inscribir en el Registro la Propiedad bienes inmuebles aportando nada más una autocertificación eclesiástica, sin ningún título de propiedad, sin publicidad, sin abrir un expediente de dominio, sin procedimiento que garantice su derecho. En el 1998 el gobierno de Aznar ampliaba este beneficio, permitiendo inmatricular también lugares de culto.
Gracias a esta permisividad legal la iglesia, en un expolio sin precedentes, ha puesto a su nombre bienes pertenecientes al pueblo por valor de muchos millones: locales, fincas, viviendas, cementerios, iglesias, plazas catedrales…más de 100.000 propiedades en todo el estado.
En Asturies, como indica el Libro Blanco del Prerrománico Asturiano y como ha reconocido en sus declaraciones el arzobispo Jesús Sanz Montes, todo el Prerrománico está a nombre de la iglesia, excluyendo Foncalada, en Uviéu. Con el robo del Prerrománico la iglesia no solo se hace con bienes de enorme valor económico y gran singularidad arquitectónica, sino que se apropian de piezas importantísimas de la cultura asturiana, imprescindibles para el conocimiento de nuestra historia.
Se desconoce aún el alcance total de las inmatriculaciones en Asturies, ya que la respuesta aportada al Grupo Inmatriculaciones Asturies por el Registro de la Propiedad no da los datos solicitados y, según el propio Grupo «es una burla», entanto que la petición hecha a la Junta General no ha recibido respuesta.
Llucía F. Marqués
Esta obra está licenciada bajo una Licencia Creative Commons Atribución 4.0 Internacional.