Hoy tendrán lugar en todo el mundo actos de commemoración de la tragedia y minutos de silencio para hacer llegar la voz de las mujeres Êzîdî a las mujeres de todo el mundo
Hace 6 años desde el ataque de ISIS al pueblo Êzidi en Shengal. El 3 de agosto de 2014. 250.000 Êzidîs fueron forzados a abandonar Shengal, el número de huerfanos oficialmente recogidos esos días es 2.745, el número de mujeres y niños desaparecidos sigue creciendo. No es algo del pasado, es actual. La estrategia de aniquilación pasa por el asesinato de los hombres, la esclavización sexual de las mujeres y el secuestro de los niños. “La violación sistemática de mujeres y niños Êzîdî , su venta en mercados de esclavos, su sometimiento a todao tipo de tortura y violencia es el militarismo -un sistema de hegemonía masculino- buscando perpetuar la mentalidad masculina dominante a través de los cuerpos de niños y mujeres”
El objetivo no es otro que acabar con el presente y futuro de todo un pueblo, el Èzidi, marcado por unas creencias que ofenden especialmente al islamismo. Adoradores de Malak Tawus, el arcángel caído que para los cristianos y los musulmanes es Satanás, llevan siglos padeciendo el acoso de otras religiones, en los últimos tiempos, del fanatismo asesino de Daesh. La ofensa para los islamistas es mayor por la determinación, fuerza y decisión de las mujeres de este pueblo, que lejos de intimidarse se unen al ejército para enfrentar cara a cara a sus violadores, muchas de ellas después de pasar años de cautiverio como esclavas. “Los varones de Daesh tienen miedo de las mujeres soldado porque creen que, si ellas les matan, no irán al cielo”.
Cada año por estas fechas las combatientes de la Unión de Mujeres de Shengal (YJŞ) e el Movimiento de Mujeres Libres del Kurdistán (TJA) reclaman que no se olviden estos crímenes, la venganza por todas las víctimas y acabar con la aniquilación de su pueblo y su cultura.
73 organizaciones de mujeres de diversos continentes declaran el 3 de Agosto como el “Día internacional de lucha contra el femicidio y el genocidio” y solicitan el reconocimiento del mismo por todos los estados, así como la toma de medidas conjuntas para asegurarse de que otra masacre como esa no se repita. La más implicada en esta reclamación es la TJA, que insiste en la importancia de llevar a los criminales ante un corte independiente internacional y acabar con el genocidio cultural en nombre de la integración. Exigen a Europa que abandone su política de destrucción de huellas relativas al genocidio de Shengal y de las mujeres Êzîdî.
Llucía F. Marqués
Esta obra está licenciada bajo una Licencia Creative Commons Atribución 4.0 Internacional.