A poco más de una semana de la decisión municipal de talar tamariscos de El Muro, la alcaldía anuncia la retirada de las tilares de Begoña, por pegajosas

Si el problema de los tamariscos era estorbar en su paso a los ciclistas del carril bici, con lo que nos encontramos en la difícilmente explicable coyuntura de talar árboles con el propósito de aplicar medidas que quieren mejorar la calidad el aire, la culpa de las tilares es gotear melaza. Esta melaza no es propia de los árboles en sí, sino que es la consecuencia de un pulgón que mora en estos árboles y que se reproduce excesivamente con la falta lluvia, por lo que la eliminaciòn del pulgón parece más sencilla o por lo menos más lógica que talar árboles. De hecho, en otros países europeos en los que se han encontrado con este problema la opción escogida ha sido la de regar habitualmente con agua y jabón, para frenar la proliferación de pulgones y limpiar posibles residuos.

La consideración de los árboles como simple mobiliario urbano, sin valorar su valor patrimonial y ecológico, lleva al gobierno del PSOE a  tomar decisiones sobre ellos en los que no un se les tiene en cuenta como seres vivos, sino como adornos prescindibles, despreciando su acción purificadora del aire y como barreras naturales contra la contaminación acústica. Además, estos árboles son refugio de numerosas  especies de aves que al tiempo  controlan el desarrollo de plagas de insectos -incluida la avispa velutina-, con lo que su desaparición descompensaría todo el ecosistema.

La medía está actualmente en estudio, pero por ahora el criterio decisivo para saber si se lleva a cabo o no esta medía es su coste de ejecución. Los vecinos han puesto en marcha una recogida de firmas en Change.org donde se solicita a la Alcaldesa que reconsidere su decisión y deje de esquilmar el patrimonio natural de Xixón.

Llucía F. Marqués

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