Colectivos de jovenes acusan a la administración de tiranizar y culpabilizar a la juventud con la cuestión del covid-19 mientras no ponen soluciones ni a este ni a los demás problemas preexistentes
La juventud asturiana lleva décadas soportando la presión de unas políticas socioeconómicas que dejan como opción casi única para sobrevivir la emigración o la aceptación de trabajos precarios, mayormente en hostelería, que no les permiten iniciar una vida por su cuenta. No en balde en Asturies la edad de emancipación es de las mayores de Europa, cercana a los 30 años. Así lo recuerdan desde Puru Remangu «41.600 jóvenes han marchado de Asturies en la última década. Y con ellas y ellos, mucha pericia, talento, ideas, frescura y todas las cosas positivas que aporta la gente joven a un lugar. Reivindicamos el derecho a marchar, a vivir nuevas experiencias, a conocer otras culturas, lemguas y formas de vida. Exigimos el derecho a poder volver, a tener un futuro aquí».
Los datos difundidos por el “Observatorio de la emancipación” del Conseyu de la Mocedá, relativos al último trimestre de 2019, reflejan que la juventud asturiana tenía ya antes de la pandemia la tasa más baja de actividad (jóvenes de 16 a 29 años que trabajan o buscan trabajo) de todo el Estado español, no llegando ni siquiera al 50%. «A ello sumaríamos una de las tasas de paro más altas, aparte de la fuerte emigración» recuerdan desde Darréu, autoras de la campaña «La normalidá nueva, la precariedá de siempre». En ella insisten en que la crisis es previa y estructural, «que precisa por lo tanto, de modificaciones estructurales para que la juventud asturiana cuente con un futuro en su país».
Por su parte, el colectivo AMA (Asociación de Mocedad Asturiana) echa en cara al Ayuntamiento de Xixón los treinta mil euros gastados en una desafortunada campaña con la que culpan a la gente joven de la difusión de la enfermedad, llenando «la ciudad y las redes sociales con contenidos paternalistas que nos criminalizan y nos echan la culpa del aumento de casos de coronavirus». Como respuesta, desde AMA han replicado con una fuerte contracampaña en la que reclaman soluciones reales a los problemas sociosanitarios, apuntando a los auténticos culpables y a las soluciones que no se han aplicado, como «Cuidad al personal sanitario. Convertid los aplausos en una mejor sanidad pública. Ya os lo hemos dicho» o «Acabad con los contratos temporales y precarios. No nos negueis un futuro digno en nuestra tierra.Ya os lo hemos dicho», entre otras recomendaciones, como la contratación de más profesorado en la vuelta el cole.
Lucía F. Marqués
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