Varias personas ingresadas por intoxicación, cientos de ciudadanos protestando en las calles, la tardía orden del Principado” de parar la planta… nada detiene a Arcelor
«Nos están gaseando», ese era el grito de los vecinos de Avilés después de sufrir la mayor nube de trióxido de azufre de las muchas que se van lanzando al cielo asturiano. Las nubes ácidas provocadas por las baterías de coque han sido denunciadas desde hace años por colectivos como la Coordinadora Ecoloxísta d’Asturies y Andecha Astur, quienes llegaron a llevar el tema ante el parlamento europeo, sin que se tomara ninguna medida al repecto.
Ahora, tras el ingreso de varias personas gravemente afectadas por la nube tóxica y gran parte de la población avilesina con problemas respiratorios e irritaciones en ojos y garganta, la Fiscalía pide un informe y el “Principado” ordena que se pare la planta que provocó el episodio contaminante, “Un auténtico triunfo. Después de años exigiendo su cierre, no hizo falta más que una intoxicación masiva para que el «Principado» actuare.” Declara con cierto sarcasmo Dulce Xil, responsable de la sección de sanidad y asociaciones de enfermos de Andecha Astur.
Sin embargo, parece que ni siquiera este envenenamiento masivo es suficiente para parar a Arcelor, la foto de esta noticia está tomada esta misma mañana y en ella se puede ver que, aunque desconocemos el carácter de las emisiones, está claro que la planta sigue en funcionamiento.
Llucía Fernández Marqués
Esta obra está licenciada bajo una Licencia Creative Commons Atribución 4.0 Internacional.