El «Principado» no ha dado información sobre el destino de ese dinero, que volverá a su arca y que estaba destinado en su presupuesto al apartado de ayudas sociales

La falta de información a la hora de tramitar el Ingreso Mínimo Vital y la calamitosa gestión del Salario Social por parte del «Principado» ha permitido que las familias que recibían ingresos por ambas vías hayan considerado que eran complementarias. «Después de todo, sumando las dos ayudas alcanzábamos escasamente a los 350€ por persona al mes» declara una persona afectada. Hay que recordar que oficialmente los ingresos inferiores a 500€ al mes por persona son considerados pobreza, por lo que incluso percibiendo las dos prestaciones las familias no salían de su situación de riesgo de marginalidad. Además, han sido varios los casos en los que fueron mal informados en los Servicios Sociales, dándoseles a entender que efectivamente, las ayudas eran complementarias.

Muchas de estas familias aprovecharon ese pequeño respiro que daba lo que ellos consideraban un «extra» para afrontar inversiones pendientes, como dentistas, gafas, reparaciones en el hogar o tratamientos médicos largamente pospuestos. Ahora se encuentran en la situación de seguir haciendo frente a esos pagos, viendo como su ingresos se recortan a la mitad y teniendo que encarar, además, una devolución de hasta 6.000 € que, caso de no satisfacerse, se les retirará de su percepción mensual.

Ese no es el único problema en la gestión del IMV, una ayuda que prometía sacar a la población de una pobreza que medra exponencialmente y que no un ha alcanzado más que al 20% de su objetivo, viniendo a sustituir en la mayoría de los casos una ayuda ya existente, el Salario Social, que era simultaneable con la ayuda por hijo a cargo, ahora anulada para perceptores del IMV. Del Ingreso Mínimo se descuenta también las Ayudar al Alquiler o cualquier otro complemento que las familias pudieran recibir para dignificar su vida. En el caso asturiano, a todo esto se suma el despropósito de que más de 9.000 asturianos sigan esperando por la tramitación de su petición, por culpa de la falta de entendimiento entre el gobierno español y asturiano.

Otra de las noticias que han recibido recientemente los perceptores del IMV es la obligación de presentar la declaración de la renta, aunque por la cantidad de ingresos no sería necesaria. En caso de no ser presentada a tiempo, la ayuda se les retiraría de inmediato.

Llucía F. Marqués

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