En un país sin apenas juventud, una tasa de paro del 38’6 entre los menores de 25 años implica que apenas hay trabajadores en esa franja de edad, una cifra que de hecho escasamente ronda las 11.700 personas
Las tasas de desempleo juvenil de Asturies son las peores del Estado y de la Unión Europea, cuestión que continúa forzando a la juventud asturiana a emigrar en busca de un futuro laboral.
En Asturies viven 68.000 menores en edad de trabajar, pero solo 19.100 de ente ellos cuentan a la hora de hacer las estadísticas, ya que la mayoría no ven utilidad a estar apuntados en las oficinas del SEPEPA, quedando fuera de las cifras oficiales. De ellos solo 11.700 tienen trabajo, una tasa de empleo del 17’2 %. Otros 7.400 están registrados en las oficinas de empleo, y el resto, más de 50.400, se mantienen oficialmente al margen del mercado laboral. Tampoco cuentan dentro las estadísticas de paro las decenas de miles de asturianos forzados a abandonar el país en busca de trabajo.
Incluso con estos datos tan sesgados, la cifra de paro juvenil sigue siendo la mayor, no solo del Estado, sino de la Unión Europea, siendo Asturies el país con peores datos en ese sentido.
Para completar el panorama, la gran mayoría de la juventud con trabajo tiene empleos centrados en el sector servicios/hostelería, uno de los más tocados por la crisis del covid-19 y que destaca por su temporalidad, inestabilidad y precariedad.
Llucía F. Marqués
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