Ganaderos y agricultores se han manifestado ayer por las calles de Uviéu. Lo han Hecho con tractores, vacas, ovejas y caballos, dejando de vez en cuando montones de estiércol por la capital para llamar la atención sobre los graves problemas que padece el sector
La axfisia al medio rural es constante y global, denuncian en su manifiesto, en el que alertan de la extinción de la más tradicional forma de vida de Asturies.
Los precios irrisorios a los que se les pagan los productos, en algunos casos por debajo mismo del coste de producción, se suman a un cúmulo de exigencias -gestión de purines, distancia de las cuadras… – que obligarán en una generación a clausurar decenas de explotaciones.
Denuncian a todas las administraciones y gobiernos, tanto asturiano como español por abandonar zona rural, desabasteciéndola de los servicios más básicos, como educación, transportes, comunicaciones o atención sanitaria, haciendo la vida en los pueblos cada vez más díficil y forzando con ello a la emigración hacia las ciudades.
Jamás hubo tantas razones para manifestarse, decían en su convocatoria, así que ayer bajaron a la capital más de 1.500 ganaderos y agricultores, con 227 tractores y decenas de animales (vacas, perros, ovejas, cabras…) y recorrieron Uviéu, desde Llamaquique hasta el Palacio de Gobierno, a la voz de «Asturies entera es ganadera».
En su camino también han tocado cencerros y silbatos y han esparcido estiércol por la carretera, como forma de protesta.
Llucía F. Marqués
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