Dirigirá la expansión de la empresa en Hispanoamérica durante los próximos cinco años

Después de 7 años trabajando en la enseñanza y otros 34 dedicado a la política profesional en los más diversos cargos, incluidos la presidencia del gobierno asturiano (1993-1995) o la delegación del gobierno español en Asturias (2004-2011), Antonio Trevín, que la semana pasada dimitió como diputado en el Congreso madrileño por desacuerdos políticos con Pedro Sánchez, ya tiene clarificado su nuevo destino laboral.

Su íntimo amigo, el empresario Macario Fernández, presidente ejecutivo de Asturiana de Laminados (ASLA), a pesar de la absoluta falta de experiencia de Trevín en el sector, tiene decidido confiar en él para dirigir la expansión de la empresa por los países hispanoamericanos.

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