La presa, parte de una antigua piscifactoría, continúa vertiendo aguas residuales en el río Al.ler, aunque la explotación lleva un año fuera de funcionamiento.

Según denuncia la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies, la presa supone un obstáculo infranqueable para el conjunto del ecosistema fluvial,  que actualmente se ve seriamente perjudicado por la deficiente calidad de las aguas, ya que la piscifactoría mantiene una concesión que le permite detraer del río un caudal  de 250 l/s y verter en él aguas residuales con un volumen de 750 l/s.

Entre los más perjudicados por esta prensa se encuentra la fauna autóctona, con especies como la nutria (Lutra Lutra)  o el desmán ibérico (Galemys pyrenaicus), ambas recogidas en el Decreto asturiano 143/2014, de 17 de diciembre, por el que se declara la Zona Especial de Conservación Ríos Negru y Al.ler (ES12000054).

La piscifactoría se escuda en la actual calificación de la parcela ocupada por los estanques de la piscifactoría como Suelo Urbano Industrial, dentro del Planeamiento Municipal Urbano del Conceyu de Al.ler, tecnicismo que los miembros de la Coordinadora Ecoloxista denuncian como una maniobra municipal incomprensible “Dados los riesgos de inundación y la afección al dominio publico”, al tratarse de una zona calificada como industrial en plena ribera fluvial. Advierten también del riesgo de la proliferación de naves industriales en la zona, amparada en esta calificación.

Por todo ello han solicitado a la Confederación Hidrográfica de Asturies la inmediata extinción de la concesión otorgada a la Piscifactoría de Entreagües y la demolición de las obras sitas en el rio, así como la apertura de las diligencias oportunas para esclarecer el motivo de la nueva autorización de vertido de aguas residuales de una piscifactoría cerrada.

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