Llucía Fernández Marqués

Es 8 de marzo y las mujeres del mundo se unen en una convocatoria sin precedente en defensa de sus Derechos. Bajo la consigna “Nosotras Paramos” mujeres de alrededor de 50 países, incluida Asturies, se pondrán en huelga para exigir que se reconozcan los aportes cotidianos que las mujeres hacen a la humanidad.

El llamamiento incluye la huelga laboral y personal, pidiendo a las mujeres que por un día no desarrollen sus labores de cuidadores de niños y mayores, ni las de la casa, además de las del trabajo. La idea es que  de esta manera la sociedad  vea, siquiera por un día, la importancia del trabajo diario de la mujer.

En Asturies las mujeres padecen, en muchos casos, una doble jornada agotadora, la laboral, en la que es habitualmente explotada, malpagada y menoscabada en su labor, que viene a sumarse a la familiar, en la que atiende a hijos, viejos y las labores de una casa pocas veces compartidas. Las consecuencias a nivel personal son obvias, agotamiento, falta de tiempo para si misma, abandono de intereses y proyectos personales… pero a nivel social esta doble jornada también tiene consecuencias aterradoras: falta de participación social, escasez de presencia política, ausencia de representación y por consiguiente masculinización de todos los ámbitos.

Por supuesto, ese no es el mayor problema de las asturianas actualmente. Conozco pocas mujeres que no hayan padecido en su vida como mínimo un caso de abuso o acoso sexual. No conozco ninguna que no haya padecido algún tipo de machismo. Está claro que no un se puede tomar mi experiencia ni la de mis conocidas como norma para hacer una estadística, pero intuyo que da una idea clara de la situación.

Los casos más sangrantes (literalmente), los que salen en las noticias, hablan de mujeres asesinadas (que no “muertas”, hay que diferenciar), de secuestros, de palizas, de amenazas, de violaciones, de violaciones en manada… Situaciones tremendas que no un provocan más que titulares morbosos y aparentes conmociones sin consecuencia. Estamos hartas de no importar. Por eso, mañana aparamos, por eso, mañana no escribo.

En Asturies la manifestación tendrá lugar a las siete de la tarde en Xixón, con salida en el Paseo de Begoña. La Plataforma Feminista de Asturies llama a mostrar el apoyo a la huelga con banderas y brazaletes morados. Además de la manifestación las mujeres están llamadas a concentrarse de 12 a 12:30 en todos los Ayuntamientos de Asturies o en caso de no upoder, a la entrada de los centros de trabajo o en los mismos portales de sus casas.

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