El nacionalismo aragonés, al igual que el del resto de los pueblos del estado, ha vivido una década marcada por el auge del movimiento españolista más exacerbado y por la irrupción de una izquierda institucionalista que, habiendo creado fuertes expectativas, incumplió sus promesas, desestructurando la participación ciudadana

En la década que ha transcurrido desde su escisión de la Chunta Aragonesista, el partido soberanista aragonés Puyalón ha creado las bases para la articulación de un movimiento independentista de izquierdas en Aragón, conformando un espacio político propio alrededor de dos ideas básicas e innegociables (independencia y socialismo).

Si algo hay que destacar de la trayectoria de este partido es su capacidad de cambio y adaptación, pasando de una corriente de opinión a un movimiento sociopolítico, y de ahí a su configuración como partido, con numerosos cambios organizativos que atribuyen a la riqueza ideológica de la militancia y a una continua reflexión para mejorar los planteamientos.

En la valoración que hacen de estos diez años destacan la situación especialmente hostil que, en Aragón como en Asturies, sufren en este momento los procesos identitarios, debido sobre todo a la presión de los medios de comunicación y al supremacismo español, “con el colofón autoritario en las exhibiciones del otoño pasado con el procés catalán”.

Para un futuro inmediato plantean una reestructuración de la organización que pase por el abandono de los amplios frentes electorales con los que habían participado en anteriores elecciones, desengañados de las sopas de siglas y de la colaboración con organizaciones de ámbito español, acusando a “La temerosa izquierda institucional” de incumplir “quedando en papel mojado muchas de las cuestiones que son parte de nuestro ADN político “

Para la organización quedan todavía muchas cuestiones pendientes: el reto futuro de organizar listas propias para comicios nacionales, la construcción de movimiento popular como base de todo, superar el cortoplacismo general y trabajar en todos los ámbitos en los que el pueblo aragonés muestre su soberanía: feminismo, LGTB+, vertebración rural, ecologismo. “Todo en plural, sólo así estaremos más cerca de ejercer la autodeterminación”.

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