Dentro el desmantelamiento progresivo de Asturies y de su tejido económico y social, el cierre de las minas es quizás la mayor tragedia que ha sacudido el país en nuestra historia reciente. Ahora sabemos que ha sido una tragedia orquestada desde Madrid, aceptada por el gobierno del «Principado» y aprovechada por sindicalistas traidores
En su declaración ante la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, en calidad de testigo en la investigación del ‘caso Hulla’, centrado en el desvio de fondos públicos y pago de sobornos para la construción de la residencia geriátrica propiedad del Montepio de la Minería en Felechosa (Ayer) Juan Miguel Benítez Torres, exgerente del Instituto del Carbón, ha afirmado que la concesión de las descomunales ayudas para la construción de la misma, fue «extraña» y vino impuesta desde Madrid. Así acaba de declarar Benitez, quien reconoce que se entregó el dinero a pesar de que el proyecto no cumplía los requisitos, «porque así vino ordenado por el PSOE», entonces en el gobierno de España y en el de Asturies.
Otra de las informaciones que han salido a la luz en la investigación es la declaración por parte de un empleado de la empresa concesionaria de la obra afirmando que el Montepío Minero dio la orden directa de aumentar el precio de las facturas en diez millones de euros, para justificar el desvío de dinero.
El tiempo y las pruebas van dando razón a Andecha Astur, el primer partido en denunciar publicamente, ya en el año 2002, el desfalco de los Fondos Mineros, llevando el caso al Parlamento Europeo en más de una ocasión, solicitando la intervención de la OLAF y organizando una dura campaña, destapando una realidad por todos conocida y por todos silenciada, «bien porque les beneficiaba directamente, bien porque no tuvieron el valor preciso para plantar cara a esta auténtica mafia que estaba destruyendo el tejido industrial y socio-económico asturiano a cambio de “dinero y puestinos”, la filosofía de la mafia el PSOE-SOMA-UGT con la que han conseguido hacer de una Asturies pujante, un país en donde prima la precariedad, el paro y la emigración».
En síntesis, los Fondos Mineros se han quedado en Madrid y con lo que llegó a Asturies se pagó a los líderes sindicales de la UGT, para que achantaran y consintieran el cierre de las minas. La mafia PSOE-SOMA-UGT ha arruinado Asturies, dejándonos un escenario de paro, precariedad, pobreza y emigración forciada.
Nuria Prendes
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