Desde el concejo exigen implicación del gobierno del «Principado» ante una situación que no puede enfrentarse solo con voluntarios y que amenaza con extender la plaga a todo el país.

Esta especie invasora, que entró desde Galicia alrededor del año 2016, se extiende con rapidez y su alimentación a base de abejas pone en peligro, no solo las colmenas, sino la propia agricultura, ya que más del 60% de los cultivos dependen de ellas para su polinización.

La lucha del Concejo de Salas, un de los más afectados, contra la invasión de la avispa velutina tiene más de dos años, pero no parece que avance, muy al contrario, el insecto va ganando posiciones y desde Salas piden apoyo al «Principado»: investigación y mayor eficacia en la extinción de los enjambres. En ese sentido, acusan de inacción al «Principado» por la lentitud con la que se responde a los avisos: de los 23 nidos de avispa denunciados y aún sin retirar algunos están avisados desde hace ya más de un mes.

Denuncian que desde el inicio el «Principado» ha hecho caso omiso de la gravedad del problema, negándose hasta hace dos años a confirmar la presencia de la plaga en el concejo. Cuando por fin la ha reconocido, los medios de eliminación puestos en marcha han sido insuficientes y no se ha puesto en marcha ninguna investigación.

El mayor peso de la lucha contra la velutina viene desarrollándose a través del Grupo de Trampéu, ahora Asociación Antivelutina, que ya había denunciado la presencia de la especie invasora en el concejo antes de la confirmación oficial, organizando charlas informativas a cargo de Luis Laria para que los vecinos fueran conscientes de la gravedad del tema. Este año han localizado casi un centenar (99) de nidos, más del doble de los encontrados el año pasado por estas fechas, lo que, junto con la ampliación geográfica de la zona afectada, hace intuir que la plaga lejos de desaparecer está haciéndose más fuerte.

Redaición InfoAsturies

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