Ya ha finalizado el proceso de restitución de los nombres franquistas de las calles de Uviéu.  Gloria Fuertes ha sido desbancada por  el Comandante Vallespín y Caballero quita de su puesto a Concepción Arenal mientras que las profesoras de la República se retiran en honor a Celestino Mendizábalcon un golpe de efecto dado por la Hermandad de Defensores, entidad falangista que en 2017 interpuso un recurso contra el anterior cambio de nombres, al que se sumó el Partido Popular.

El cambio inicial que eliminaba del callejero uvieín los nombres franquistas, en cumplimiento de la Ley Histórica, fue realizado por el tripartito entonces en el gobierno -PSOE, IU y SOMOS- sin ajustarse a la normativa legal para el procedimiento, permitiendo así que la extrema derecha se salga con la suya, recuperando los nombres que homenajean al golpe de estado franquista y al posterior régimen. Así lo recogía la sentencia emitida en septiembre del 2018, desoida por el anterior gobierno local, dirigido por el socialista Wenceslao López, actualmente portavoz socialista en el Consistorio, quien no acató la orden pero tampoco inició los trámites correctos para que el cambio de nombres fuera legal. La segunda sentencia, de octubre del 2020, obliga no solo a la humillante reposición de los nombres, sino que será el Ayuntamiento de Uviéu quien cargue con los costes derivados, no solo de ambos cambios de calles, sino de los dos procedimientos judiciales, así como los de reparación de las placas dañadas en la primera retirada de las mismas, por un valor superior a los 8.000 euros.

En cualquier caso, es previsible que este cambio de nombres sea provisional y que a medio plazo sea necesaria una nueva reposición de los nombres de las calles, en aplicación de la ley asturiana de la Memoria Histórica, que prohibe desde 2019 “los símbolos y actos de exaltación del franquismo o de carácter antidemocrático”. La falta de concreción de esta norma ha contribuido a la actual situación, ya que en su redacción se recoge que permite que las entidades locales adopten “las medidas necesarias para proceder a la retirada o eliminación de los elementos contrarios a la memoria”, sin obligar a ninguna medida específica.

Mientras tanto, la superbandera del Reino de España estará acompañada en las calles de Uviéu por sus fieles defensores, entre los que destacan sanguinarios reconocidos como Gerardo Caballero Olabézar, cuyo papel destacado en la brutal represión de posguerra le valió para conseguir su nombramiento como delegado del Orden Público, puesto desde el que planeó y organizó la represión de la mano de los escuadrones falangistas, formando también parte de la comitiva que recibió al líder nazi Heinrich Himmler durante su visita a Franco.